Ermita de San Cristóbal de Bolea (915m)

Fecha19 enero 2025
Zona Huesca. Hoya de Huesca
AccesoBolea
Desnivel290m
Distancia 7.7km
Tiempo 1h13′ 2h49′
Prominencia
Track GPS

Con Esmeralda Andreu

Excursión a uno de esos enclaves que parecen de leyenda y que esconde la provincia de Huesca. Como todas las ermitas rupestres, la ermita de San Cristóbal se ubica en una pared escarpada al fondo de un estrecho barranco y te preguntas quién y por qué escogería un lugar tan recóndito, oscuro y frío para levantar sus paredes. Una ruta sencilla nos permite llegar hasta esta ermita y descubrirla perfectamente camuflada entre las rocas del barranco del río Sotón.

En Bolea también merece la pena una visita a su Colegiata gótica y el pueblo es famoso por el aceite de oliva.

Acceso: Por la A-132 dirección Ayerbe hasta Esquedas. Se toma la A-1206 hasta Bolea. Se va circunvalando Bolea por el oeste en dirección a Puibolea y se toma a la izquierda la calle que se dirige a las piscinas. Recorremos 1km de pista hasta que se bifurca a la izquierda el GR-1/GR-17 y a la derecha hacia la ermita de San Cristóbal. Se podría seguir este ramal de pista en coche hasta la ermita de Santa Quiteria.

Descripción de la ruta: Aparcamiento (655m). Seguimos el ramal de la derecha que lleva a la ermita de Santa Quiteria (el de la izquierda es el GR a Aniés, Sarsamarcuello y Loarre). Tras ella hay otra bifurcación a la derecha (670m 0h15′). Avanzamos entre campos de olivos y almendros. Un poco más adelante de nuevo bifurcación a la derecha (cartel Ermita de San Cristóbal PR-111) (695m 0h19′). El camino se estrecha y se convierte en sendero entre vegetación de bojes y enebros.

Nos introducimos en la ladera de la orilla izquierda del barranco del río Sotón. A veces la vegetación se cierra bastante, pero el sendero no se pierde. El barranco se estrecha y se vuelve sombrío hasta que, finalmente, estamos encerrados entre las verticales paredes de roca. Es entonces cuando hay que fijarse en la pared de nuestra izquierda donde pasa desapercibida la ermita.

Hay que cruzar el barranco, que apenas lleva agua, y subir por una senda terrosa abierta entre el boj y con mucha pendiente, incluso hay que ayudarse agarrando los troncos de boj. A la izquierda vemos la escalera de piedra colgada en la roca que lleva a la entrada de la ermita de San Cristóbal (915m 1h30′). Este último tramo no es apto para personas con vértigo.

Tras una rápida visita a la estancia de la ermita volvemos por el mismo camino al aparcamiento (655m 2h49′)

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